Actualmente no hay tablao flamenco en el que no se escuche ese sonido seco tan particular entre las palmadas y el que hace el bailaor con su tacón durante el zapateo. Sí, te hablamos del cajón flamenco, un peculiar instrumento hace tiempo llegó a España para quedarse.
¿Cuál es su origen? ¿Cómo se integró a la cultura española? En este artículo te lo contamos todo: Sus orígenes, su historia y cómo es que un instrumento que ni siquiera es de origen europeo se ha arraigado tan profundamente en una música tan española como el flamenco.
Orígenes del cajón peruano
Tal como lo lees, el cajón tiene su origen en América, más específicamente en Perú.
El cajón peruano nació en el siglo XIX. Para ser exactos, a mediados de siglo. Los esclavos africanos que llegaron a esas tierras sufrieron la prohibición por parte de la Iglesia Católica de usar los tambores como parte de sus rituales por considerarlos paganos (realmente lo que estaban impidiendo era que se comunicaran entre ellos a grandes distancias).
Sin embargo, los africanos consideraban al tambor como parte indivisible de su música y su tradición. Por eso, se vieron forzados a buscar un elemento sustituto que les sirviera para la percusión en sus diferentes celebraciones.
Muy pronto descubrieron que los cajones de madera en los que transportaban las verduras y otros víveres hacían un sonido muy particular. Además, este era distinto dependiendo del lado que golpearan y funcionaba perfectamente como instrumento de percusión.
Los descendientes de los africanos que llegaron a Perú diversificaron la forma de obtener sonidos de estos cajones. En su rebeldía por no dejarse imponer la prohibición del tambor, usaban para la percusión cualquier instrumento que pudiera sacar un sonido limpio de la caja; sin importar si era de metal, de madera o de cualquier otro material.
Es así como el cajón peruano podía tocarse con cucharones, cucharas de metal, palos de madera, herramientas y otros utensilios. Cualquier cosa que produjera sonido era válida, con tal de saltarse las prohibiciones de la Iglesia para que las etnias africanas celebraran sus fiestas y rituales religiosos.
Es así como los cajones pasan a formar parte de la tradición musical afroperuana y desde el año 2001 han sido reconocidos como patrimonio cultural del Perú.
Pero, ¿cómo llega a España un instrumento tan remoto y de origen circunstancial?
Evolución del cajón e incorporación al flamenco
En principio, el cajón se tocaba de forma horizontal y el ejecutante estaba sentado en una silla. La caja tenía un hueco en el centro que permitía la salida del sonido.
Actualmente. Desde el inicio del siglo XX, el cajón se toca de forma vertical y los ejecutores ya no tienen la costumbre de sentarse en una silla, sino que se ubican a horcajadas directamente sobre él. De esta forma, el cuerpo del ejecutante tiene mucho que ver con el tipo de sonido que se transmite del instrumento.
¿Cómo llegó el cajón a ser parte de la música española que incluso muchos creen que el instrumento es de origen peninsular?
La historia no es tan antigua. Se remonta al año 1977, cuando Paco De Lucía estaba en Perú como parte de su gira por América.
En aquella oportunidad, el afamado guitarrista asistió a una fiesta organizada por el embajador de España y en esa celebración participó la cantante y compositora peruana Chabuca Granda. Ella estaba acompañada por un músico que tocaba un peculiar cajón que llamó poderosamente la atención de Paco de Lucía.
De Lucía se enamoró del sonido y el ritmo que imprimía el instrumento, así que probó probar tocar la guitarra con este acompañamiento. Se trajo uno a España y lo incorporó a sus presentaciones de música flamenca.
Este tipo de guitarra es ideal para quienes quieran incursionar en la música académica e interpretar géneros musicales folclóricos, flamenco, bossa nova, etc.
El cajón flamenco hoy
Del cajón peruano original al cajón flamenco actual han ocurrido unas cuantas modificaciones. Gracias a ellas es que podemos escuchar ese sonido tan particular que marca el ritmo al bailaor.
El cajón flamenco actual tiene las siguientes características:
- La tapa es la única pieza que es contrachapada y la cara más delgada del instrumento. Mientras todas las caras tienen unos 15 mm de grosor, esta solo tiene un máximo de 4 mm que deben soportar los golpes sin romperse debido a que es flexible. Esta cara frontal que, es la más delgada, es la que el percusionista toca con la punta de los dedos con la o con la palma ahuecada. Los sonidos más graves se producen golpeando hacia el centro y los más agudos hacia el borde superior de la caja.
- Los mejores cajones incluyen 3 tornillos de afinación que permiten modificar la tonalidad. Otra forma de conseguir sonidos enriquecidos es añadiendo objetos de metal en su interior o colocando cuerdas de metal para mejorar la resonancia.
- El agujero está situado hacia la cara trasera y tiene unos 12 cm de diámetro.
- Los cajones modernos se fabrican con madera, miden entre 47 y 50 centímetros de altura y tienen una base de 30×30 centímetros.
- La forma del cajón permite que el músico se siente a horcajadas con el instrumento entre sus rodillas.
- Para su transporte se puede sujetar la caja por el agujero que tiene en una de sus tapas o en una funda con agarraderas adecuadas.
Qué tener en cuenta antes de comprar un cajón
¿Estás pensando en comprar un cajón? Estos son los aspectos que debes considerar para que tu inversión sea la más acertada.
- La calidad de la madera es una de las primeras cosas que tienes que tener en cuenta.
Actualmente las mejores son la madera de haya y la de abedul, hay cajones que son de caoba que es una madera muy maciza y ofrece tanto excelente sonoridad como durabilidad. El roble también es una buena madera, aunque no es tan común. Si consigues uno de roble tendrás un sonido potente.
- En cuanto el tamaño considera tu propia altura para que puedas sentarte a horcajadas sobre él con comodidad. Esto es fundamental si el instrumento es para un niño o para una persona más grande.
- Si quieres una mayor durabilidad, es importante que también elijas una funda. Aunque el cajón es tan versátil que hasta sirve como asiento, tener la protección adecuada para trasladarlo garantiza su durabilidad, sobre todo contra el agua y condiciones climáticas adversas. También lo protege contra arañazos y golpes.
- Si eres un principiante o quién va a tocar el instrumento es un niño, hay cajones baratos de madera de MDF y aglomerado que permiten el aprendizaje sin el riesgo económico en caso de que el instrumento resulte dañado.
- Consulta en la tienda o con el fabricante si el instrumento que vas a comprar tiene alguna garantía.
Lo importante sobre todas las cosas es que puedas tener un cajón en el que con el que te sientas cómodo mientras te dejar llevar por la magia del flamenco.